Aspectos a considerar al hacerse fotografías 

Si estás en casa y quieres mejorar tus habilidades fotográficas, ¿por qué no trabajas en las técnicas de iluminación y poses para fotografía de mujeres? Aquí tienes algunas técnicas esenciales de iluminación y posado para retratos que puedes practicar cómodamente desde tu casa, sin necesidad de equipos ni lugares especializados.

Estas técnicas también sirven para mejorar las poses de hombres para fotos, ya que las técnicas son generales e indistintas para hombres y para mujeres.

Posado individual

Lo verdaderamente relajado no suele ser muy atractivo. Tumbar a alguien en una silla no funciona. Lo que hay que hacer es ayudar a la persona a colocarse en la posición correcta para que se sienta relajada y tenga un buen aspecto. Un buen punto de partida es sentar a alguien ligeramente elevado, como en el brazo de un sofá o en un taburete alto, en lugar de en un asiento bajo. A continuación, anime a la persona a deslizarse hacia delante y a sentarse con la espalda recta para que no se encorve de forma poco atractiva. A continuación, intenta girar los hombros ligeramente en dirección contraria al eje de la cámara. La posición cuadrada con respecto a la cámara suele parecerse demasiado a una foto policial.

Lo siguiente que hay que tener en cuenta son las líneas diagonales, que son más fotogénicas que las horizontales y verticales por la forma en que permiten que el ojo del espectador se mueva por todo el encuadre. Así que si puedes colocar los brazos y las piernas de forma que formen una línea diagonal en el sensor, es probable que tengan un aspecto mucho más agradable. Esto suele llevar a que los brazos y las piernas se apoyen en elementos de la escena, reforzando también ese aspecto relajado. En caso de duda, dale a tu sujeto algo para que se apoye, ya sea un árbol en el que apoyar la cadera o el respaldo de una silla en el que descansar un brazo.

Luz de ventana

En épocas como ésta, en las que no es fácil acceder a un estudio lleno de equipos de iluminación, no hay mejor fuente de luz para retratos que una luz natural grande, bonita e indirecta. Y eso está en prácticamente todas las casas a través de una ventana. La luz de ventana ideal está orientada al norte porque nunca recibe la exposición directa del sol. Esta iluminación brillante e indirecta es perfecta para los retratos. En el caso de las ventanas que reciben una exposición directa del sol (una ventana orientada al este por la mañana, por ejemplo), una cortina transparente o una sábana blanca se convierten en un difusor ideal para suavizar la luz.

Empieza por colocar al sujeto de cara a la ventana y lo más cerca posible de ella. Esto puede poner la espalda del fotógrafo contra la ventana o en un ángulo de despiece. Alternativamente, prueba a colocarte en una posición en la que la cara del sujeto esté a 90 grados de la ventana y el fotógrafo esté enfrente. Esto creará un aspecto de iluminación dividida que aumenta el dramatismo, pero también permite que el sujeto permanezca cerca de la luz para que se produzca una caída pronunciada en el lado de la sombra. Cuanto más se aleje el sujeto de la ventana, más plana será la luz. Recuerda apagar también las luces interiores para garantizar un equilibrio de color único para la luz de la ventana.

Sombra abierta

Otra gran opción de iluminación para retratos -y que te permite salir al exterior- es el uso de la sombra abierta. Se trata de la luz solar brillante e indirecta que se encuentra bajo los árboles altos, por ejemplo, o debajo de cualquier estructura que cree un voladizo o dé sombra al sujeto del sol directo. La gran diferencia entre la sombra abierta y la simple sombra es que la sombra abierta es más brillante porque está «abierta» al cielo. No son sombras profundas y oscuras, sino que están iluminadas por la luz del sol que se refleja en el cielo abierto. Una puerta abierta, por ejemplo, es un lugar ideal para crear una sombra abierta. Sólo tienes que colocar al sujeto un paso o dos dentro de la puerta para que esté fuera de la luz directa del sol, pero todavía iluminado por el cielo. Un grupo de árboles también es un buen lugar para encontrar una sombra abierta, colocando al sujeto de forma que esté protegido de la luz directa del sol. Esa es la naturaleza de la sombra abierta: crea una luz clave procedente del cielo y no del sol.